La espuma de poliuretano es consecuencia de la reacción química de sus dos componentes, poliol e isocianato, que mediante un equipo o máquina de proyección es aplicada sobre cualquier superficie limpia, seca y saneada, ofreciendo un sistema continuo de aislamiento sin puentes térmicos.

Se puede aplicar por:

• Proyección sobre muros y cubiertas.
• Inyección en el interior de la cámara de los muros de fachada.

PROYECCION DE POLIURETANO

El poliuretano proyectado es un sistema de aislamiento con espuma de poliuretano. Se pulverizan simultáneamente los dos componentes (poliol e isocianato) sobre el sustrato, al que se adhiere la mezcla resultante. Se emplea para ello un equipo especial para proyectar la espuma, que se deberá aplicar con unas condiciones climatológicas determinadas. La temperatura ambiente debe ser de mínimo 5º C, y no más de 40º C. La humedad máxima del sustrato debe ser del 20% si es porosa y si no lo es, debe estar seca por completo. La humedad relativa ambiental no debe ser superior al 85%. Asimismo, no debe haber vientos superiores a los 30 km/h.

INYECCION DE POLIURETANO

El poliuretano inyectado es un sistema de aislamiento con espuma de poliuretano. El material se inyecta en forma líquida en la cámara de aire de las fachadas, en donde se expande adaptándose a todas las irregularidades y conformando un aislante rígido y de gran durabilidad. También es un excelente absorbente acústico y es impermeable, y su instalación no reduce espacio habitable.

Antes de la aplicación de la espuma de poliuretano inyectada, es necesario detectar las grietas y humedades de la pared o techo a tratar. Una vez se han solucionado estos defectos, hay que revisar por dónde pasa la instalación eléctrica y sellar los huecos. Para que la instalación sea eficaz, debemos contar con un espacio mínimo de 5 cm para la expansión del aislante.

Hay espumas de poliuretano de celda Cerrada y celda Abierta.